A tan solo tres días de que se vuelva a abrir el plazo de inscripción (https://becas.faortega.org/) me paro a pensar en lo rápido que se ha ido el tiempo. Ya casi ha pasado un año desde que yo era la que me inscribía. Más de 300 días desde aquel en el que llegué a mi casa y le pregunté a mis padres: "¿Me puedo ir 10 meses a América?" y más de 300 días desde que ellos me dijeron: "Vale, a ver, ¿qué tienes que rellenar?"
Dicho así puede parecer que solo les estaba pidiendo irme a una excursión con el instituto, pero es que ninguno de los tres había siquiera pensado que fuese a pasar de verdad. Yo, por ejemplo, me inscribí como una forma de demostrarme a mí misma que podía, al menos, presentarme a una beca.
La gente me dice que soy valiente por haberlo hecho, pero es que en aquel momento ni siquiera se me pasó por la cabeza que me la fueran a dar. Y a día de hoy todavía lo agradezco, porque si me hubiera parado a pensar, probablemente no me habría atrevido.
Probablemente sea porque yo soy de ese tipo de personas que prefiere arrepentirse de haber hecho algo, que de no haberlo hecho. Pero si tú no eres de esa clase de personas, si tú eres de los que prefieren barajar las opciones y elegir con más cuidado... si estás planteándote presentarte a la beca pero todavía no estás seguro ... entonces esta entrada va para ti.
Hi! Mi nombre es Irene Melián, soy de Canarias, y en este blog iré contando mi experiencia a lo largo de los diez meses que pasaré estudiando en Estados Unidos gracias a una de las becas que ofrece la Fundación Amancio Ortega.
viernes, 30 de septiembre de 2016
viernes, 2 de septiembre de 2016
Atascada en la primera fase
Fase 1 del proceso de adaptación: el viajero, recién llegado a un país
diferente, y cuya lengua no conoce bien, piensa que
todo es atrayente, nuevo y excitante.
Duración: 5 o 6 días...
...O 8, o 9, o 15.
Duración: 5 o 6 días...
...O 8, o 9, o 15.
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