Dicho así puede parecer que solo les estaba pidiendo irme a una excursión con el instituto, pero es que ninguno de los tres había siquiera pensado que fuese a pasar de verdad. Yo, por ejemplo, me inscribí como una forma de demostrarme a mí misma que podía, al menos, presentarme a una beca.
La gente me dice que soy valiente por haberlo hecho, pero es que en aquel momento ni siquiera se me pasó por la cabeza que me la fueran a dar. Y a día de hoy todavía lo agradezco, porque si me hubiera parado a pensar, probablemente no me habría atrevido.
Probablemente sea porque yo soy de ese tipo de personas que prefiere arrepentirse de haber hecho algo, que de no haberlo hecho. Pero si tú no eres de esa clase de personas, si tú eres de los que prefieren barajar las opciones y elegir con más cuidado... si estás planteándote presentarte a la beca pero todavía no estás seguro ... entonces esta entrada va para ti.
Seguramente te preguntarás:
¿Por qué dejar toda tu vida atrás?
¿Por qué complicarte si eres feliz en España?
¿Por que arriesgarte a irte tan lejos?
¿Qué ganas? ¿Qué pierdes?
Así que por aquí te dejo una lista de razones para decir sí, para arriesgarte y pasar el mejor año de tu vida:
-Vas a madurar desde el primer minuto aquí, y lo mejor es que tú mismo te vas a dar cuenta.
-Vas a aprender a valorar lo que tienes, tanto en España como en América. Dicen que no se sabe lo que uno tiene hasta que lo pierdes, y te aseguro que llevan razón.
-Te vas a dar cuenta de todas las personas que te quieren y que se preocupan por ti. Tu familia, tus amigos... aprenderás quienes te quieren de verdad en sus vidas y quienes no.
-Vas a aprender a aprovechar los momentos y a disfrutar de lo pequeños detalles.
-Te vas a atrever a probar comidas, costumbres y mil cosas nuevas.
-Vas a estar agradecido de todo lo que la gente haga por ti mientras estás aquí,
-Vas a darte cuenta de lo fuerte que eres.
-Vas a sentir que no te alcanza la vida para devolverle a la gente lo que han hecho por ti.
-Vas a aprender a solucionar los problemas tú solo.
-Vas a estar ilusionado casi cada minuto de tu nueva vida.
-Vas a aprender de cada detalle del que nunca pensaste que podrías aprender.
-Te vas a dar cuenta de que tus padres tenían razón en más cosas de las que tú pensabas.
-Vas a abrir tu mente.
-Vas a acabar con esa timidez que te impedía hacer cosas que querrías hacer.
-Tienes la oportunidad de empezar tu vida desde 0. Nadie te conoce, así que puedes ser la persona que siempre has querido ser.
-Conocerás a muchísimas personas que te marcarán de por vida.
-A partir de ahora vas a tener dos familias, completamente distintas entre sí pero ambas increíbles.
-Reirás, te divertirás y, quién sabe, a lo mejor también llorarás, pero lo que importa es que volverás a sonreír.
-Podrás tener momentos malos, pero aprenderás a salir de ellos.
-Vas a echar de menos, pero también te vas a dar cuenta de que "echar de menos" no tiene por qué significar sentarte en una esquina a llorar.
-Con el paso del tiempo vas a empezar a sentir que no perteneces a un solo lugar, sino que tu hogar está dividido y nunca más volverá a estar en un único sitio.
-Crecerás como persona. Mejorarás, y acabarás el año siendo "una versión mejorada de ti misma."
-Le demostrarás al mundo, y más importante, a ti mismo, que tú puedes con esto y con mucho más.
Ah... claro... y aprenderás inglés,
Y bien, ¿no te parecen suficientes razones? Puede que tengas algunas preguntas o dudas que te gustaría resolver. Puedes mandarme un mensaje a mi Instagram: @ireneemelian, y te explicaré cualquier cosa que quieras saber.
Y recuerda, quien no arriesga, no gana.